La detección de API es crucial, ya que ayuda a las organizaciones a identificar e inventariar todas sus API, incluidas las inactivas, heredadas o zombis. No puede proteger lo que no sabe que existe; sin un inventario completo y preciso, su empresa puede estar expuesta a riesgos significativos.
Observaciones clave
- Las API amplían la superficie de ataque: en el panorama digital actual, las API no son solo una parte de la pila tecnológica, sino que también son el núcleo de sus aplicaciones, servicios en la nube y flujos de ingresos. Nuestra guía del comprador de seguridad de las API le ayudará a comprender las capacidades específicas que debe buscar a la hora de encontrar soluciones para proteger las API de su empresa.
- La visibilidad es fundamental: la mayoría de las organizaciones carecen de una visión completa de su ecosistema de API, que incluye tanto las API nuevas como las heredadas. Esta falta de visibilidad deja abierta una importante superficie de ataque, especialmente con las API zombis e inactivas que no están gestionadas ni protegidas. Una detección de API eficaz es el primer paso para proteger sus activos digitales.
- Detección y corrección de amenazas de API en tiempo real: los ataques a las API son inevitables, y la capacidad de detectar y responder a las amenazas en tiempo real es crucial. Las herramientas avanzadas utilizan la IA y el aprendizaje automático para supervisar la manipulación de datos, las filtraciones y el comportamiento sospechoso, y deben integrarse a la perfección con los flujos de trabajo de seguridad existentes para bloquear los ataques y automatizar su corrección.
- Pruebas de seguridad de API con enfoque "shift-left": los equipos de desarrollo suelen esperar demasiado tiempo para iniciar las pruebas de seguridad de API, lo que puede provocar que las vulnerabilidades se cuelen en la producción. Un enfoque en segundo plano, en el que las pruebas comienzan al principio del proceso de desarrollo, es esencial para evitar ataques, mejorar el cumplimiento y aumentar la confianza en su ecosistema de API.
Preguntas frecuentes
Los principales desafíos comienzan con la falta de visibilidad de las API y sus riesgos, e incluyen la necesidad de identificar y abordar vulnerabilidades como las configuraciones erróneas de API, los errores de codificación de las API y la falta de controles de autenticación. También es clave para gestionar una estrategia de seguridad de API: entender y protegerse frente a los métodos de ataque de API en constante evolución, como los que se enumeran en los 10 principales riesgos de las API según OWASP. Estos problemas pueden complicarse por el rápido desarrollo e implementación de nuevas API, que a menudo intercambian datos confidenciales y abren la puerta a costosas filtraciones de API.
La detección de amenazas en tiempo real implica la supervisión continua del tráfico de API en busca de anomalías, manipulación de datos e infracciones de políticas. Cuando se detecta una amenaza, el sistema debe alertar a los equipos de seguridad e, idealmente, bloquear o corregir automáticamente el ataque para evitar la exfiltración de datos y otras actividades maliciosas.
El enfoque "shift left" en las pruebas de seguridad de API implica integrar las pruebas de seguridad en las primeras fases del proceso de desarrollo, en lugar de esperar a que la API esté en producción. Esto es importante porque permite a los equipos identificar y corregir pronto las vulnerabilidades, lo que reduce el riesgo de que se produzcan ataques con éxito y garantiza la seguridad de API desde el principio.
Entre las características clave se incluyen la capacidad de localizar e inventariar API independientemente de su tipo o configuración, detectar API inactivas y heredadas, identificar dominios en la sombra, realizar análisis automáticos en busca de problemas críticos y minimizar el desarrollo personalizado mediante integraciones predefinidas con los principales componentes de la infraestructura.
Los niveles de gravedad personalizables permiten a las organizaciones priorizar los esfuerzos de corrección en función de su tolerancia específica al riesgo, los requisitos normativos y las políticas internas. Esto garantiza que se aborden primero las vulnerabilidades más críticas, lo que ayuda a gestionar los recursos de forma más eficaz y a reducir el riesgo general.